pretendo crear un espacio interior sosegado, dominado por una luz tenue, que resbale por los muros de hormigón.Un espacio no inerte, que cambie según la hora del día, según la epoca del año...y con una mirada sugerente hacia la ciudad, a través de ese hueco vertical que aparece en la linea de contacto de los dos muros de hormigón.
Los puntos de lectura se situarán frente al muro de hormigón bañado por la luz cenital
el núcleo de comunicaciones se lleva al muro medianero,ocultando el movimiento de circulación vertical
los vacios que conforman el pozo de luz tratan de seguir la geometria de los muros
la imagen exterior quiere ser potente, enfatizar la idea de esquina, de quilla de barco, que se asoma a Madrid
la propuesta quiere que se lea dentro del contexto urbano, que no sea una pieza autista en la ciudad. por ello se barajaron distintas variaciones, sobre todo en el basamento, jugando con otro material que no fuese el hormigón.
pero entonces se perdía la idea de los dos muros de piedra que emergen, por lo que esa lectura del medio se va a centrar en la textura del hormigón. una textura rugosa, con un encofrado de entablillado de madera horizontal en la cara exterior, para crear un juego de luces y sombras, y no se vea desde la ciudad como una pantalla plana